Existen días de días! Pero hoy en especial, abres los ojos, es domingo, miras por la ventana y está lloviendo… Es decir cambio de planes!!! Hoy cocino en casa y chineo el paladar de mi esposito y el mío!
Les comparto esta receta que sinceramente me quedò espectacular y sinceramente la hice con lo que al abrir mi refrigerador encontré… Yo sé que pueden pensar que estoy diciendo tonteras, porque qué raro que tenga uno cordero en casa,pero en verdad, fue así… Claro que siempre que veo ingredientes buenos o productos que valen la pena en las tiendas y supermercados, compro y congelo para cuando estoy antojada como hoy 😜.
Por lo que mi inspiración hoy fueron costillas de cordero (Australianas o Nueva Zelandesas) que había comprado en diciembre (congeladas), que acompañaré con vegetales… Antes de irme de vacaciones el mes pasado, me habían sobrado muchas vainicas de pedidos y clases, por lo que las había lavado quitado puntas y así para no perderlas las había congelado… Por lo que hoy estas chicas serán uno de mis acompañamientos… Y por último lo único que tenía en el refrigerador fresco (no congelado) era una maya de papa semilla baby … Ahora así, Manos a la obra! Se van a chupar los dedos porque esto se come con las manos!

Ingredientes:
- 1 rack de costillas de cordero (8 unidades)
- Aceite de oliva DOP
- Ajo
- Vino tinto
- Romero fresco
- Sal y pimienta
- Sal rosada gruesa
- Harina
- 1 huevo
- Pan molido
- Aceite para freír
- Papas semilla o mini
- Parmesano
- Vainicas baby
- Vinagre balsámico blanco aromatizado
Preparación:
Comenzamos descongelando las costillas de cordero, descongelan bastante rápido, vienen al vacío y protegidas con papel especial, luego las lavamo y quitamos excesos de grasa y siguiendo las líneas del hueso hacemos los cortes para separarlas.
Una vez separadas, las puse a marinar con aceite de oliva, vino tinto, ajo picado, Romero fresco, sal y pimienta. Las cubres con plástico transparente y dejas por al menos 1 hora que se impregnen de olores y sabores.
En el tiempo que se están marinando las costillas, pongo a hervir agua y colocamos las papas previamente lavadas con todo y cáscara (enteras), yo puse unas 30 papitas.
Sin salar el agua las dejo cocer el tiempo necesario, las punzo con un tenedor para ver si la cocción esta lista y unos minutos antes de retirarlas del fuego, saqué las vainicas que tenía congeladas y las blanquié por unos 3 minutos… Esto fue suficiente (seguro por el congelamiento estuvieron listas en poquísimo tiempo)… Colé papas y vainicas y las puse cada tipo en un recipiente separado.
Las papas las puse en un recipiente para horno.
En mi caso, quise hacer la mitad dejándolas enteras y la otra mitad las estripé (no como puré, sino sólo majadas), como les explico En este vídeo…
Por otro lado si quieren hacer una bonita presentación, pueden también hacer unos pinchos con los palitos del Romero fresco e insertarlo en las papas como si fueran pinchos… esto les daré sabor y bonita presentación al plato. El resto del Romero fresco lo ponemos a gusto sobre las papas.
Procedemos a ponerles sal, yo prefiero sal rosada y gruesa, pimienta y bañarlas con un buen aceite de oliva.
Finalizamos este platillo con un poco de pan duro lo trituramos con las manos para dar el toque crujiente y espolvoreamos con queso parmesano rallado. ponemos al horno por unos 25 minutos a 350• hasta dorar
Listo! Las papas ya están… Sigo con condimentar las vainicas que ya deberían estar frías completamente. Solamente utilizo sal, aceite de oliva de buena calidad y vinagre balsámico blanco aromatizado en mi caso con frambuesa (se consiguen en el mercado de muchos sabores) no usar el balsámico tradicional color oscuro porque puede ser muy fuerte y pelearse con los sabores del cordero.
Ahora sí mi parte preferida… Como no me decidía como preparar las costillas, quise hacerlas de dos formas para así, estar felices los dos… tanto mi esposo (las prefiere empanizados y fritas) como yo (parrilladas).
Ponemos en un sartén, aceite para freír, una vez que llegue a temperatura estarà listo para poner las costillas, pero antes procedemos a pasarlas por 1) harina, 2) huevo, 3) pan y ahora así a freír.
Una vez bien cocidas y doradas por ambos lados y que queden sin sangre… Las colocamos sobre papel toalla absorbentepara eliminar el exceso de grasa y seguimos con las costillas en la parrilla, pongo poco aceite con una servilleta y la dejo cocinar unos minutos por ambos lados con el mismo jugò de la marinaciòn.
Les damos vuelta y cuidamos que no se nos pase la cocción y tampoco las dejemos crudas. Y listo cuando estén en su punto ya las podemos servir.
Ya sea que sirvas el plato ya todo listo o que lo lleves por separado a la mesa, te aseguro les encantará.
Espero les guste y que encuentren todos los lngredientes.
Disfruten como hago yo de los placeres que te ofrece la cocina…
Natalia